domingo, 15 de noviembre de 2020

 
 

Eximiciones

 

Es una casa de tres plantas

en un hartazgo de salas, recámaras y salones;

con pasillos que -en apariencia- no conducen a ningún sitio en especial

que sólo existen para lucir sordidez

para confundir

y demorar el paso de un lugar a otro.

 

Falta revoque y pintura en algunas paredes

    -la obra fue abandonada sin terminar-.

 

Hay una habitación donde nunca entré.

 

Sé que ahí está "lo prohibido".

 

Sé que estás, ahí,

en ese lugar de la casa donde habito, hace años.

 

Desde un ventanal, el sol, al ponerse, resalta la puerta

su picaporte

el éxtasis del atrevimiento

y es entonces, después de contemplarla,

al momento de abrirla

cuando despierto al presente.

 

 


 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario