Discernimientos
Trasnoche.
Surgen voces al dorso de las palabras
-en la cocina crepitan leños,
con llamas que encandilan la psique-.
Ya no hablemos.
El agua brota de la vertiente
afuera
en las rocas.
Se puede leer el sesgo de esta época
entre líneas de sosiego.
jueves, 14 de noviembre de 2019
Fugacidades
Está por llover entre las ánimas
encima del pulso de cada sobreviviente.
Aquí estamos, bajo la mirada de campanarios y edificios,
erguidos
a pesar de haber partido el último tren, la última gaviota.
El frío silencia calles y balcones.
Todo consiste
en no desesperar.
Al amanecer
un dúo de maniquíes habrá de pintar con luz
vidrieras y ventanas
la comarca entera.
Está por llover entre las ánimas
encima del pulso de cada sobreviviente.
Aquí estamos, bajo la mirada de campanarios y edificios,
erguidos
a pesar de haber partido el último tren, la última gaviota.
El frío silencia calles y balcones.
Todo consiste
en no desesperar.
Al amanecer
un dúo de maniquíes habrá de pintar con luz
vidrieras y ventanas
la comarca entera.
domingo, 3 de noviembre de 2019
Amparos
Vuelvo
donde las sílabas arrastran espíritus
lejos de la blasfemia.
-Sed de dar
de tender una mano
en nubes y campos-.
¿Quién habla?
La gloria y la pobreza;
la luna y el Trino:
son Uno.
En el firmamento
se despliega un manto de colores
todavía sin nombre.
Obra pictórica: La última cena, Leonardo da Vinci, Milano, Italia.
Vuelvo
donde las sílabas arrastran espíritus
lejos de la blasfemia.
-Sed de dar
de tender una mano
en nubes y campos-.
¿Quién habla?
La gloria y la pobreza;
la luna y el Trino:
son Uno.
En el firmamento
se despliega un manto de colores
todavía sin nombre.
Obra pictórica: La última cena, Leonardo da Vinci, Milano, Italia.
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